top of page

Chucho Valdés y su Cuarteto : Los Cuatro Magníficos ! ! !

Actualizado: 10 jul 2023


En el marco del Festival de Jazz de Montreal, el maestro Chucho Valdes, subió la temperatura durante su presentación a sala llena en el Theatre Maisonneuve de la Place des Arts.


El jueves 6 de julio la temperatura en la ciudad de Montreal estaba rompiendo récord de calor. Había mucha humedad en el ambiente, sin embargo esto no fue motivo para que el Theatre Maisonneuve, ubicado en el complejo festivalero de Place des Arts se llenará hasta la “bandera” para recibir al virtuoso pianista, compositor y arreglista cubano Chucho Valdes.

Mientras en las afueras del Teatro, en el marco del Festival de Jazz de Montreal se estaban presentando en conciertos gratuitos; el grupo estadounidense Tank and the Bangas, en la calle denominada “Las Performances TD”, en otra calle adyacente denominada “la Escena Rio Tinto”, estaba la Orquesta canadiense de Salsa, Lengaia Salsa Brava, al interior del teatro Maisonneuve, como estaba previsto, a las 8:00 pm entró al famoso escenario del teatro, Chucho Valdes, trajeado de pantalón blanco, suéter blanco, con un saco anaranjado y por supuesto con su inseparable boina.

Acompañado de sus músicos : José A. Gola (bajos), Horacio Hernández (batería) y Roberto Jr. Vizcaino (percusión), el maestro Chucho Valdes al piano, marcó los acordes para dar comienzo a lo que sería un magistral concierto.

Con un teatro lleno a reventar, Valdés se dirigió al público en el idioma español para presentar a sus músicos, y recordar que hace 30 años (1993) se presentó por primera vez en el Festival de Jazz de Montreal. Contó anécdotas de cómo surgieron los temas que estaba por presentar en el concierto.


Fotos cortesía de Frédérique Ménard Aubin del Festival de Jazz de Montreal


1- Apertura. A las 8:03 pm, comienza el maestro Valdés con el tema de apertura, un número que comenzó en ritmo de balada y luego Chucho le fue agregando ese sabor caribeño que hizo que el público, un poco “frío” a pesar del cálido clima, comenzara a entrar en “calor”.

2- “Son 21”. El segundo tema que tocó el cuarteto de Chucho Valdes se llama “Son 21”, En esta pieza el maestro Valdés demostró por qué es considerado como uno de los mejores pianistas afro jazz del mundo.

En este momento ya el público estaba rendido ante la maestría del maestro y de su cuarteto.

3- “El Tango de Lorena”. Antes de comenzar a sonar este tema, Chucho Valdes explicó el origen de esta composición que dedicó a su esposa Lorena, que se denomina “El Tango de Lorena”. Es un tema que comienza con el sonido propio de un tango y que de pronto Valdes hace un giro en el tango para convertirlo en un son, en perfecto acoplamiento con la banda, sin un ápice de error en el cambio de género, luego vuelve al tango y así lo hizo tres o cuatro veces. Del Tango al Son y del Son al Tango.

El público no paraba de aplaudir la genialidad del maestro Chucho Valdes. Sencillamente brillante esta interpretación.

4- “Mozart a la Cubana”. Valdes contó que este tema lo plasmó un día en el que estaba indagando acerca de la vida del músico Austriaco, Wolfgang Amadeus Mozart. Según Valdes, él se imaginaba a Mozart en una playa (cubana) con un Habano (tabaco) en la mano, con una novia… y una botella de ron. De esa manera el visualizo a “Mozart a la Cubana”

El músico se paseó por temas de Mozart con arreglos en afro jazz, en el que el baterista Horacio Hernández, el percusionista Roberto Jr. Vizcaíno y el bajista José A. Gola, demostraron porque forman parte del cuarteto de Chucho Valdes, al interpretar de manera casi perfecta la ejecución de las notas en sus respectivos instrumentos, lo cual fue recompensado por el público con aplausos de admiración.

Génial desempeño de los músicos

5 “Ponme la Clave”. Si en el tema anterior los músicos mostraron total acoplamiento, y el público los premió con una salva de aplausos, en este arreglo de “Ponme Clave”, Chucho Valdes los hizo destacarse de manera individual. Ante una mirada del director (Valdes), el baterista Horacio Hernández, hizo con la batería lo que quiso sin perder la clave, de igual manera Valdes con levantar un dedo, hacia que Roberto Jr. Vizcaíno en la percusión “rompiera” los cueros de las congas y del bongó y se entremezclara con los acordes del bajo de José A. Gola, todo ante la mirada y dirección de Chucho Valdes, quien con una nota de su piano hacía que el contrapunteo entre las congas, bongo y la batería volvieran a juntarse, sin perder la clave.

Excelente descarga,

6 “Balada a la Abuela”. Este tema es una balada que Chucho le dedicó a su abuela. En este número quedó evidenciada la calidad como pianista y como músico del gran Chucho Valdes, quien haciendo alarde de su maestría en el piano, terminó el tema con acordes para piano del célebre músico ruso Serguéi Rajmáninov, lo que provocó entre los asistentes una gran euforia por lo que estaban presenciando.

Comentarios como: “Con este tema ya mi boleto está retribuido”. “Sencillamente Chucho Valdés es una leyenda”.

Aplausos de pie para el maestro.

7 “Tributo a Chick Corea”. El concierto continuó con la explicación por parte de Chucho Valdes del siguiente tema que iba a tocar, recordando al fallecido Chick Corea, de quien se refirió como uno de los jazzistas más grandes de la historia.

Y qué manera de homenajear a su amigo Chick Corea. El maestro Valdés comenzó a tocar los acordes del tema “Armando Rumba”, hasta arropar con sus notas de piano a la audiencia, que no cesaba de aplaudir. Sin dejar de tocar las teclas y a su vez dirigiendo, Valdez con una mirada hizo que entraran Horacio Hernández en la batería, Roberto Jr. Vizcaíno en la percusión, y José A. Gola en los bajos (contrabajo y bajo), de manera armoniosa y a su vez “ruidosa” para “Armar tremenda Rumba” con extraordinarias descargas por parte de cada músico, haciendo las delicias del público.

Valdes y su cuarteto, fuera de serie con este homenaje al maestro Chick Corea.

Eran las 9h20 pm cuando terminaron el tema Armando Rumba, y se despidieron. Sin embargo los músicos regresaron a pedido de los asistentes, quienes no paraban de aplaudir.

Chucho comenzó a descargar en el piano, el baterista le siguió en la descarga, el percusionista no se quedó atrás y comenzó su descarga en las Congas y el bongó. El bajista atento a las señas del maestro Chucho, hizo lo propio.

A las 9h30 se despidieron nuevamente y la gente no se movió, haciendo que regresaran al escenario a las 9h 33 pm, esta vez Chucho Valdes comenzó con un tema que tipo balada que terminó con toque de son y rumba.

Un concierto inolvidable para un audiencia que supo apreciar la calidad del gran Chucho Valdes, e inolvidable también para la 43e edición del Festival Internacional de Jazz de Montreal.














27 visualizaciones0 comentarios
bottom of page