Haber arrollado en la fase de grupos del Mundial de Rusia 2018 no sirvió de nada para la selección de Inglaterra en los octavos de final, que tuvo que emplearse a fondo para poder doblegar a Colombia y romper con la sequía de 12 años sin avanzar hasta la tercera fase.
La escuadra británica tuvo que encomendarse a la labor de su portero Jordan Pickford para dirimir las acciones en la tanda penaltis, a la que se llegó después de que los cafeteros, por intermedio de su goleador Yerri Mina, igualaron el partido sobre el final del segundo tiempo.
El encuentro se tornó un poco turbio en el inicio para los suramericanos, que no encontraban espacios para romper con una agobiante defensa inglesa, que le cortó los circuitos a sus mediocampistas de creación, entre los que no apareció la estrella james Rodríguez, apeado por lesión.
Inglaterra tuvo acercamientos leves al área de David Ospina, aunque solo tuvo una ocasión clara y fue por intermedio del delantero y capitán inglés Harry Kane con un cabezazo al que no pudo darle dirección y el balón se marchó lejos de la portería.
Con el marcador intacto finalizó la primera mitad de un juego que para muchos estuvo por debajo del nivel esperado tratándose del cartel de ambos combinados y el talento individual de cada uno de ellos.
Para la segunda parte Inglaterra volvió a tomar la iniciativa, pero Colombia defendía con todo cada posesión con una férrea marca sobre los creadores de fútbol en la escuadra europea, tan fuerte que el arbitraje tomó protagonismo. De hecho, el primer gol vino precisamente tras una falta dentro del área del centrocampista Carlos Sánchez, que tumbó a Kane y tras una revisión en el VAR se confirmó la pena máxima y que el propio artillero se encargaría de hacer efectivo a los 57 minutos.
Con la desventaja en la pizarra que significaba la eliminación, el seleccionador argentino que lleva las riendas colombianas, José Néstor Pekerman, apostó por darle ingreso al campo a todos sus delanteros disponibles apostando al todo o nada. Además sacó a Carlos Sánchez y le dio cabida a Mateus Uribe, protagonista indirecto del tanto de la igualdad.
Cuando finalizaba el tiempo Uribe aprovechó un balón regado fuera del área y sacó un remate de pierna derecha que iba buscando la escuadra izquierda de la arquería rival, pero Pickford se lo negó con un manotazo que rechazó el balón al córner.
Fue justo en el tiro de esquina cuando emergió la figura de Mina, que con un testarazo muy parecido al que le dio la clasificación a Colombia frente a Senegal, incrustó la esférica en las redes y puso a celebrar a la alta cantidad de aficionados neogranadinos que se apostaron al estadio a aupar a su seleccionado.
Se terminaron los 90 minutos reglamentarios más los adicionales y la prórroga surgió una vez más, tal y como sucedió por duplicado en la jornada del domingo.
En los dos tiempos extras las energías de ambas oncenas escasearon. Salvo una que otra aproximación por parte de la representación del Reino Unido, que no pasó a mayores y la ruleta rusa de los penales se hizo inminente.
Allí Radamel Falcao abrió la cuenta, al tiempo que Harry Kane lo emulaba. Luego le correspondió el turno a Juan Guillermo Cuadrado que tampoco falló, de igual manera de como lo hizo Marcus Rashford. En tercer lugar le tocó el turno a Luis Muriel, que se lució cambiándole la trayectoria al balón del lado contrario al que se lanzó el arquero, mientras que Jordan Henderson falló su oportunidad para abrirle las puertas al éxito a la selección Colombia.
Pero Mateus Uribe no pudo aprovechar esa y falló en su intento y después de que Kieran Trippier marcó su gol, Carlos Bacca hizo lucir al guardameta inglés con un disparo franco que este pudo detener casi que desde el suelo para otorgarle el boleto a su equipo a la siguiente fase, en la que se enfrentarán con Suecia, que apartó del torneo a Suiza con una diana de Emil Fosberg y se metió en cuartos de final de una Copa del Mundo 24 años después.