El martes de esta semana se celebró en el principado de Mónaco la gala de la UEFA para llevar a cabo el sorteo de la Champions League 2018-2019, además de entregar los premios a los mejores jugadores de la temporada anterior.
Fue una tarde noche llena de luminarias en la pequeña nación europea, que tuvo como gran protagonista al croata Luka Modric, acreedor de dos galardones por su sobresaliente desempeño en el torneo pasado. Aunque para la sorpresa de muchos, el portugués Cristiano Ronaldo no hizo acto de presencia, a pesar de aparecer entre los nominados.
El evento inició con el reconocimiento para el costarricense Keylor Navas como el Mejor Portero tras sus destacadas actuaciones en el pórtico del Real Madrid, vigente tricampeón del certamen.
Luego se desarrolló la designación de los grupos para los cabezas de serie, que tuvo entre sus integrantes además del conjunto merengue, a sus similares del Atlético Madrid y Barcelona, ganadores de la Europa League y de la Liga Española, respectivamente; así como también a los monarcas de las otras ligas mejor posicionadas en el ranking de la UEFA, incluida la de Rusia.
La atención estaba centrada en lo que le depararía el futuro a la escuadra que ahora dirige el español Julen Lopetegui, que en primeras instancias salió seleccionado para liderar el Grupo G; mientras que sus archirrivales blaugrana salieron sorteados en el pool B.
A medida que transcurría la escogencia de los bombos con el destino de cada una de las 32 escuadras participantes, que tuvo como grandes reveladores a los ex astros del balompié mundial y sudamericano, Ricardo Kaká y Diego Forlán, los directivos conocían a sus rivales para planificar desde ya los viajes y las estrategias para afrontar los desafíos.
En el ínterin de cada ronda de sorteo, se aprovechó para entregar las estatuillas a Sergio Ramos y Luka Modric, quienes se erigieron como el Mejor Defensor y el Mejor Mediocampista de la competición durante la campaña 2017-2018.
En la postrimerías del show y con los grupos conformados, los seguidores de la rivalidad Real Madrid-Barcelona, pudieron apreciar como ambos tuvieron una suerte dispar.
Los culés, en teoría, tendrán un camino lleno de obstáculos para trascender a los octavos de final, pues en la fase de grupo les tocará medirse nada más y nada menos que con el Tottenham inglés, el PSV Eindhoven holandés y el Inter de Milán italiano, designado desde ya como el “Grupo de la Muerte”.
Mientras que a la Casa Blanca le tocaron al menos un par de rivales más asequibles, como lo son el Viktoria Plzen de República Checa y el CSKA de Moscú además de el no tan fácil equipo de la Roma de Italia.
Otro de los clubes que gozó con cierta atención por contar ahora entre sus filas con Cristiano Ronaldo, fue el de la Juventus, el cual se ubicó en el Grupo H, junto con el Manchester United (Inglaterra), Valencia (Español) y el Young Boys (Suiza).
El Atlético de Madrid, cuyo estadio será la sede de la gran final del torneo, deberá buscar su boleto a la siguiente etapa como miembro del Grupo A, en el que batallará con el Borussia Dortmund (Alemania), el Mónaco (Francia) y el Club Brujas (Bélgica).
Para el Manchester City de Pep Guardiola y el Bayern Munich el sendero luce más claro. Los británicos medirán fuerzas con el Shakhtar Donetsk (Ucrania), Olympique Lyon (Francia) y Hoffenheim (Alemania). Los bávaros, en tanto, chocarán contra el Benfica (Portugal), Ajax (Holanda) y AEK Atenas (Grecia).
Neymar y su temible Paris Saint Germain tratará de conseguir el cupo a octavos ante el Napoli (Italia), Liverpool (Inglaterra) y el Estrella Roja (Serbia).
Por último, considerado como el “Grupo de la Vida”, aparece el D, compuesto por el Lokomotiv de Moscú (Rusia), Porto (Portugal), Schalke 04 (Alemania) y Galatasaray (Turquía).
Para ponerle punto final a la gala, el máximo ente del fútbol europeo reconoció a Modric nuevamente, aunque en esta ocasión con el lauro más importante, el del Mejor Jugador de la competencia, cortando con la hegemonía de su hasta este año compañero de equipo Cristiano Ronaldo y relegando de igual manera al egipcio Mohamed Salah.