Finalmente el delantero argentino ha decidido cumplir su contrato hasta 2021, aunque afirma : "el presidente (del club) no me daba ‘bola’ a lo que le estaba diciendo."
Finalmente se terminó la polémica por la salida, o no salida de Messi del Barcelona. Leo Messi seguirá en el Barcelona al menos hasta el 30 de junio de 2021. Ha sido el propio jugador el que lo ha anunciado este viernes en unas declaraciones al portal Goal.com.
El anuncio se veía venir después de la reunión de su padre y su hermano Rodrigo con el presidente azulgrana, Josep Maria Bartomeu, y el directivo Javier Bordas. El pasado miércoles, el presidente dejó muy claro que no estaba dispuesto a vender a Messi y se remitía a los 700 millones de la cláusula de rescisión. Se negaba en rotundo a poner un precio de salida por el crack argentino.
A Messi no le quedaba otra que denunciar el contrato que tenía con el Barcelona. Pero eso suponía ir a los tribunales en un largo proceso que afectaría su imagen y la del club. Además, Manchester City y PSG, equipos interesados en él, no querían entrar en un fichaje por el jugador si este estaba instalado en los tribunales.
Por este motivo, el futbolista ha descartado la idea de dejar el Barcelona porque no quería denunciar al club azulgrana: "Nunca iría a juicio contra el Barcelona porque es el club de mi vida. Si esa es la única vía para salir, me quedo", dijo a Goal.com.
Ante esta situación de bloqueo, Messi mandó un burofax a la directiva del club pidiendo su salida del Barcelona. El futbolista explica la razón del burofax.
“El burofax fue para hacerlo oficial de alguna manera. Durante todo el año llevaba diciéndole al presidente que me quería ir, que había llegado el momento de buscar nuevas ilusiones y nuevos rumbos en mi carrera. Él me dijo todo el tiempo: ‘Ya hablaremos, que no, que esto y lo otro’, pero nada. Por decirlo de alguna manera, el presidente no me daba ‘bola’ a lo que le estaba diciendo. Mandar el burofax era hacer oficial que me quería ir y que quedaba libre y el año opcional no lo iba a usar y me quería ir. No era para montar un lío, ni para ir en contra del club, sino la manera de hacerlo oficial porque mi decisión estaba tomada”
Anteriormente, había dejado clara su postura respecto a la cláusula de rescisión en una carta que mandó su padre, Jorge Messi, a Javier Tebas en la que se reafirmaba que no tiene validez por lo que ningún club tiene que pagar 700 millones para comprar al futbolista.