Tres títulos de la NBA, dos trofeos de Jugador Más Valioso, cinco elecciones al Juego de Estrellas. Todos estos logros para cualquier jugador resulta un gran palmarés, incluso a lo largo de una carrera.
Pero para Stephen Curry, dueño de todas esas gestas durante los últimos cinco años, no son suficientes. El base armador de los Warriors de Golden State quiere convertir su legado en leyenda. Que su paso por la liga sea de los más extraordinarios para jugador alguno. O al menos, así lo manifestó recientemente.
Durante su estadía en Filipinas, en donde se encuentra promocionando la marca deportiva que lo patrocina, Under Armour, se tomó un tiempo para atender a los medios locales y analizar la venidera campaña, en la que su club intentará conseguir el tricampeonato, ahora con un plantel más fuerte, considerando la llegada del estelar pívot Demarcus Cousins.
“Queremos más. Tenemos la meta de seguir ganando campeonatos año tras año, y por eso trabajamos tan duro durante la temporada baja. Es por eso que uno se prepara mental y físicamente. La carrera en la NBA puede ser muy corta y por eso queremos ganar tantos títulos como sea posible”, declaró Curry a BusinessWorld.
Curry está consciente de que el resto de las escuadras se han reforzado para intentar acabar con la hegemonía que él y sus compañeros ha implantado no sólo en la Conferencia Oeste, sino en toda la NBA; por ello, sabe que debe intentar mantenerse al tope de sus condiciones físicas, tras ser azotados por las lesiones durante los últimos años, para cumplir con sus ambición de seguir agregando anillos en sus dedos.
“Estoy emocionado. Siento que alcancé mi mejor momento como jugador y quiero permanecer ahí tanto tiempo como pueda, apretando para seguir ahí. Tengo grandes compañeros y una fantástica organización para jugar. Tenemos la oportunidad de hacer algo que rara vez se ve en la NBA: ganar tres veces seguidas. Me entusiasma ese desafío”, sentenció la estrella desde el país asiático.
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