El Mundial de Rusia 2018 ha sido de todo menos predecible. Algo que a muchos les gusta, pero a otros no tanto. Y es que en las primeras cuatro fechas del magno evento del balompié internacional, cuatro de los equipos que son considerados como grandes candidatos al título no pudieron ganar en su estreno.
El último que se unió a la lista, que incluye a España, Argentina y Alemania, fue Brasil. La pentacampeona mundial no pudo batir a Suiza y tan solo se tuvo que conformar con el empate a un gol contra Suiza, en lo que fue su primera presentación como miembro del Grupo E.
La canarinha no pudo demostrar todo su potencial y aunque fueron los que tomaron la iniciativa en el partido gracias a un golazo de Philippe Coutinho al minuto 20, se quedaron cortos y exhibieron un rendimiento por debajo de lo que todos esperaban, sin menospreciar el gran planteamiento defensivo de los suizos.
Ni siquiera Neymar, una de las grandes estrellas del campeonato, pudo ayudar a la escuadra dirigida por Tite, que buscaba comenzar con el pie derecho el certamen y así limpiar la imagen dejada en el pasado Mundial cuando fueron vapuleados en casa por la campeona Alemania.
Coutinho, autor del único tanto brasileño, fue lo único rescatable. No solo por la jugada del gol, en la que extremo ficha del Barcelona aprovechó un balón despejado y desde el vértice derecho del fuera del área grande sacó un disparo de pierna derecha con mucha rosca que se clavó en el ángulo izquierdo de la portería custodiada por Yann Sommer.
Suiza sintió el golpe. Pero no se amilanó. El combinado dirigido por Vladimir Petkovic, por el contrario se envalentonó y le jugó cara a cara a Brasil, pero no pudo hacer mayor daño, al menos en la primera mitad que terminó con la ventaja parcial para los amazónicos.
Para la segunda mitad, ambos técnicos mantuvieron sus oncenas intactas. Neymar seguía opacado por un Valon Behrami que fue su sombra a lo largo de todo el partido y no lo dejó desplegar su fútbol.
Apenas transcurridos cinco minutos de la etapa complementaria, los europeos colocaría la diana de la paridad del partido por intermedio de Steven Zuber, quien aprovechó un desmarque en el área chica y con la testa sacó un remate potente que dejó sin reacción al portero Alisson Becker y puso a celebrar a la hinchada que se dio cita en el Rostov Arena para apoyar a su selección.
Los siguientes 40 minutos fueron de paridad total. Tite realizó los cambios pertinentes en búsqueda de darle un vuelco a las acciones, pero las respuesta de su contraparte anularon cualquier estrategia y conforme se acercaba los minutos la desesperación de los brasileños se hizo notoria.
Roberto Firmino, que entró en sustitución de Gabriel Jesús tuvo dos ocasiones claras de gol, pero una la erró y la otra fue negada por Sommer con una buena intervención debajo los tres palos.
Los 90 minutos expiraron y la repartición de puntos fue inminente, para que ambos se ubiquen en la mitad de tabla del Pool E, que tiene en la cima por tres puntos a Serbia, próximo rival de Suiza. Costa Rica sin puntos se ubica en la última posición y deberá medirse contra Brasil el próximo viernes.